Co-Responsabilidad de los Propietarios/Co-Propietarios. Una gran debilidad que requiere fortalecerse.
Entre muchos problemas, debilidades y deficiencias que presentan la mayoría de inmuebles que se rigen por la Ley 675, se encuentra la actitud y la posición que adoptan los propietarios/copropietarios frente a sus inmuebles y sus necesidades y prioridades. En la mayoría de lo casos, el problema nace desde el momento en que los constructores hacen entrega de los inmuebles, después que han alcanzado el 51% de la unidades debidamente vendidas y recibidas por los nuevos propietarios. A partir de allí los nuevos propietarios/copropietarios se deben encargar y responsabilizar de los destinos de su propiedad. En todos los casos, los constructores se desentienden de su responsabilidad y se remiten a realizar un acto de entrega formal, aportando un reglamento de propiedad horizontal que debe ser actualizado y ajustado a la características y especificaciones de toda índole, que va adoptando el condominio o conjunto, en la medida que se va desarrollando y completando con la llegada de sus nuevos propietarios/copropietarios.
Después de esto aparece el problema de la concepción que se tiene sobre la administración y se procede de manera improvisada y con bases mínimas y débiles y se contrata de manera parcial a algún allegado a la propiedad o a una empresa administradora, para que se encargue de esta importante función y responsabilidad. A partir de allí se designa a una persona que se encargara solo de las tareas básicas; como son el recaudo de las cuotas de administración, el contrato de vigilancia, el contrato de mantenimiento y algunos aspectos básicos de administración y todo ello con una dedicación de tiempo parcial; porque lo primero que se ha considerado en la primera asamblea, es la austeridad presupuestal, el error mas grave que se tiene en las propiedades, cuando estas nacen como persona jurídica. Este es un paradigma (la austeridad) que es necesario revertir y entender que una PH no puede gestionarse sin planeación y mucho menos sin presupuesto.
Vale la pena que entendamos la importancia de reconocer en la Propiedad Horizontal y en todos sus inmuebles, la presencia de una organización con características empresariales que obligan a visualizar una empresa con todos los elementos de administración, gestión y gerencia que requiere este tipo de organizaciones.
En el campo de la corresponsabilidad de los propietarios y copropietarios (que no es lo mismo, pero sin son los mismos) es aceptar su responsabilidad y compromiso con su inversión, su activo y su patrimonio y consecuentemente con sus vecinos y colegas de sociedad y dedicar el tiempo y el espacio necesario para educarse y formarse en todo lo relacionado con la Ley 675 y sus complementos, como el reglamento interno de propiedad y todos los documentos y material relacionado, que permita estructurar una verdadera organización con elementos y herramientas empresariales que faciliten su funcionamiento y garanticen la conservación y sostenibilidad de la inversión en el tiempo, con valores agregados en rentabilidad, bienestar, convivencia, calidad de vida y felicidad. Es una responsabilidad de todos, que debe entenderse con seriedad y profesionalismo y en el mejor de los casos, tener disponibilidad, disposición, actitudes y participación creativa y colaborativa, aportando con inteligencia colectiva en la construcción de territorios organizados y espacios autogestionados.
Los propietarios/copropietarios no debemos utilizar nuestros inmuebles, solo como la pequeña área o metros cuadrados donde pasamos las noches o descansamos un fin de semana; mas allá de esto, que es una realidad y hace parte del disfrute de la compra, es necesario agregar valor y aportar, para mantener el precio de la inversión y en el mejor de los casos, sumarle valorización para enriquecer la cuenta patrimonial del balance personal y de paso aportar en el crecimiento y desarrollo de ese pequeño territorio donde ha decidido instalar su nido como proyecto de vida y como etapa intermedia en este gran proyecto que cada uno de nosotros tiene en sus propósitos individuales.