Para entender y aceptar una nueva perspectiva sobre la administración de PH es necesario asimilar estas entidades, como organizaciones empresariales, sin importar que estén clasificadas como entidades sin animo de lucro, (ESAL), pues, esto no las exime de contar con una administración de nivel superior que garantice su funcionamiento y especialmente que asegure su permanencia en el tiempo con sustentabilidad y sostenibilidad.
En este contexto es importante tener en cuenta la importancia de contar con una cultura de PH con bases solidas en los inversionistas/socios/accionistas/propietarios/copropietarios de los inmuebles que se rigen por la ley 675; sin esto es difícil iniciar la transición hacia un nuevo modelo de administración de PH y seguiremos en la zona de confort que se ha construido durante los 17 años que lleva la Ley 675.
No falta mucho tiempo para asistir a la integración de las sociedades de la Tierra, a llegar a lo que algunos denominan "aldea global". No podemos detener los cambios, ni oponernos a ellos con la idea de que si les somos indiferentes y no les damos importancia no suceden. Las naciones se vienen transformando multidimensionalmente, no es sólo la tecnología, ni los nichos de mercado, ni las formas de producción, ni la competencia en las economías liberadas, es un cambio en la manera cognoscitiva de pensar y actuar en el mundo de hoy.
La Administración es una práctica de trascendental importancia social y económica que permite entablar relaciones de diversa índole entre los agentes económicos, debido a la confianza que se deposita en el trabajo de los profesionales que se orientan hacia la administración y gerencia de inmuebles sometidos al régimen de propiedad horizontal en Colombia.
Es respecto al conocimiento y la experticia sobre administración y gerencia integral que este ensayo propone plantear la necesidad de cambio, de adaptación y transformación que exigen las comunidades y todo el entorno de las PH’s.
Esta propuesta tiene como fin la evolución de la administración tradicional y básica de las PH’s (especialmente las de uso residencial), "articulando" toda la información derivada del desarrollo del objeto social de las propiedades como organizaciones empresariales, para realizar gestión del conocimiento en las mismas y de este modo convertir dicho conocimiento en la ventaja competitiva y comparativa más importante de la propiedad.
No es posible esperar que la administración básica de propiedad horizontal continúe con las ideas de su génesis antes de la ley 675, la responsabilidad de la administración y gerencia ahora tiene que ver con el mejoramiento de la sociedad y las economías que nacen al interior de las PH’s, como efecto del cambio de las organizaciones en un contexto empresarial.
Es hora de romper el statu quo (zona de confort) de la administración, de no caminar de espaldas a las realidades de la organización, de liberarse de la idea atávica de que la administración únicamente se ocupa de tareas básicas (cobro de cartera, pago de servicios, vigilancia y mantenimiento).
Las propiedades como organizaciones empresariales necesitan de los administradores integrales con visión estratégica para ayudar a dinamizar su evolución, esto sólo es posible por medio del conocimiento, entrega, dedicación y profesionalización de esta actividad.
El deber ser de un Administrador de PH, le impone características relacionadas con lo correcto, lo justo, lo óptimo, lo previsivo, lo más conveniente, en fin, lo debido.
El deber ser de un Administrador de PH, denota obligatoriedad y reconocimiento de validez universal para un grupo social, que se identifica con el ideal propuesto por el mismo deber ser.
El deber ser de un Administrador de PH, recae sobre ideas, objetos, personas, grupos de personas, acciones, comportamientos, actuaciones, entre otros.
El problema que se plantea sobre la administración de inmuebles sometidos al régimen de propiedad horizontal en Colombia es teórico, pero su desarrollo y solución traspasan al ejercicio profesional, no sólo vista como labor, sino como institución en la que se vierte la confianza de las comunidades que conforman esa pequeñas sociedades que constituyen las propiedades horizontales.
La Administración es el campo que más ha avanzado de las ciencias administrativas, económicas y contables: El carácter científico de la administración le otorga un papel protagónico al Administrador en las organizaciones modernas obligándolo a entender que el enfoque organizacional con visión empresarial de las propiedades horizontales, lo ubican en una sociedad exigente y lo obliga profesionalmente, para extender su campo de acción al conocimiento del objeto social de las organizaciones y llegar hasta el mundo virtual, donde la internet y las redes sociales lo obligan a introducir el rol de Comunnity Manager, como parte de sus funciones y responsabilidades; de igual forma tiene que entender y aceptar que en el siglo XXI el liderazgo no es individual y ahora se trata de liderazgo colectivo y debe replantearse el concepto de participación ciudadana (comunitaria) y pasar a conjugar tres conceptos que forman una ecuación de administración con liderazgo colectivo, que tiene que ver con la inclusión, la participación creativa y colaborativa y la inteligencia colectiva. Y a esto debe agregarle La Felicidad, como propósito superior que debe perseguir toda sociedad y por esta vía ingresar al mundo de la Gerencia de la Felicidad o  parte de sus conocimientos y competencias en esta nueva perfilación.
La Administración como profesión debe evolucionar traspasando sus fronteras interdisciplinarias y la concepción que históricamente ha marcado su aplicación en las PH’s, la administración es mas que apoyo y asesoría a las comunidades en tareas básicas. La evolución de la Administración debe transitar hacia la responsabilidad integral con énfasis en la función social y ecológica que se le ha dado en la Ley 675. La responsabilidad social y ecológica del Administrador se materializa en la confianza que se deposita en su gestión. Cuando el Administrador brinda confianza transmite una garantía personal basada en sus cualidades profesionales, la Administración informa del estado real de un tema de interés, de este modo el cliente (propietario/copropietario) asegura ese patrimonio inmaterial denominado confianza.
Gracias a la confianza que brinda el Administrador; se sustentan las relaciones sociales y económicas que posibilitan la existencia del mundo inmobiliario, representado en las propiedades horizontales en sus diferentes usos o destinos.
La sociedad actual se dirige a vivir en lo que se denomina aldea global, suceso que evoluciona al género humano en múltiples direcciones, en especial lo referente a la cultura y a la ciencia. Por lo tanto, la Administración debe ser consecuente con tales transformaciones para integrarlas en su campo de acción y transmutarse, adaptándose a los diferentes cambios sociales, económicos y de mercado, para convertirse en motor de innovación y cambio en pro del mejoramiento continuo en las organizaciones, respondiendo así a las necesidades de la futura aldea global.
La transformación de la Administración aplicada a la propiedad horizontal, implica un cambio en su concepto teórico elemental, para esto es necesario reconocer la forma básica de concebir la Administración en la Ley 675 con sus impactos negativos desde la promulgación de esta Ley, especialmente por la debilidades en su campo de acción profesional, las ideas elementales que se practican en la Administración actual, la responsabilidad social a escala menor, la manera de dimensionar el entorno, sus amenazas y oportunidades.
Se pretende con este ensayo crear una deliberación e invitar a una reflexión profunda, en quienes ejercen funciones de Administración, pero especialmente en propietarios/copropietarios, miembros de concejos de administración y comités de convivencia y en general en todos los integrantes de las asambleas generales y en otros escenarios, a académicos, analistas, estudiosos del tema y lideres políticos y de opinión, además del gremio empresarial, relacionado con el mundo inmobiliario y de la construcción, para repensar la gran responsabilidad que tiene la Administración con la economía y la sociedad que se reúne y construye en las PH’s, entendida en el contexto global del que hacemos parte en este momento, reconociendo a la PH como una organización empresarial, como un subsistema de un macro sistema global, que debe ser considerado antropológica, social y económicamente.
Este escrito busca ampliar el campo de acción del ejercicio profesional de la Administración, planteando la necesidad de que sea multidisciplinaria y multifuncional, apoyada por expertos en diferentes disciplinas, los que aúnen fuerzas y apoyen al profesional que ejerza como administrador, en beneficio de las organizaciones de PH. También se quiere motivar a los profesionales universitarios (administradores, economistas, abogados, ingenieros, arquitectos, otros) a no quedarse únicamente en el cumplimiento de la normatividad, sino traspasar las barreras de creatividad en pro de impulsar el objeto social, ecológico, económico y financiero de las organizaciones donde presten sus servicios.