Este ensayo esta dirigido a todos los propietarios de inmuebles que se encuentren construidos y regidos por el régimen de propiedad horizontal; pero, también involucra a aquellas personas naturales y jurídicas que están actuando como administradores y representantes legales de estas propiedades. Pero también es necesario, obligatorio y urgente destacar la importancia y protagonismo que deben presentar las constructoras, inmobiliarias y el estado colombiano.
Como contexto para entender y asimilar el mensaje que contiene este documento debemos ubicarnos en el año 19 del siglo XXI y darle la connotación de una centuria que ha traído un dinámica de transformación nunca antes vista por la humanidad.
La dinámica y la velocidad que esta experimentando la humanidad en materia tecnológica y todos los efectos e impactos que esta tiene en las diferentes esferas de las sociedades y las economías, incluyendo a la propiedad horizontal, donde nacen y se construyen pequeños territorios, que crean comunidades, que a su vez estructuran de manera natural ecosistemas sociales y económicos, que en todos los casos producen un alto impacto en las localidades, barrios, municipios y grandes ciudades, y este movimiento tan grande y de tanta escala en la medición de crecimiento y desarrollo de las ciudades y municipios, hacen que la propiedad horizontal se ponga en la tarea de revisar y proponer cambios drásticos en la forma como esta modalidad de vivienda, trabajo y entretenimiento de la población, esta sucediendo en las propiedades horizontales, lo cual lleva a que se entienda y admita que esta población se encuentra creciendo hasta porcentajes de casi el 70% en las grandes ciudades y sus zonas metropolitanas y avanza rápidamente en otros municipios del país.
El gran paradigma de la ley 675/2001, es que lleva 17 años contaminado un terreno que hace que se deteriore la riqueza social y económica que se encuentra en la propiedad horizontal, por lo tanto es necesario, entender y aceptar que el régimen actual de PH en Colombia y los modelos de Administración de PH, deben transformarse y transitar hacia las tendencias del siglo XXI y aceptar que debemos diseñar y definir un nuevo régimen que cobije los nuevos formatos y reenfoque los actuales y de igual forma defina una nueva plataforma de administración moderna, integral y tecnificada, que exija perfiles de administración, con un alto contenido de competencias disruptivas y empiece a introducir cambios, que permitan salir de las zonas de confort que tienen las PH desde el 2001, cuando nace la ley 675.
Por lo tanto, el paradigma mas grande que se debe derrotar es la deficiencia y vacíos de la actual ley y empezar el camino de una reingeniería integral a la propiedad horizontal en Colombia; para lo cual se debe desplegar un movimiento fuerte, decidido y debidamente soportado con una propuesta documentada, soportada y respaldada por todos los actores que concurren en esta problemática, en cabeza de los propietarios y copropietarios.